Prólogo
del “Libro del Pesebre
de St. Michael” |
Desde 1.998 hemos desarrollado poco a poco desde el antiguo
pesebre de
Navidad, un “pesebre para (casi) todos los tiempos del año”.
Comenzó
con escenas del pesebre para el tiempo de Adviento. Siguieron escenas
de los relatos de la Pasión y de la Pascua del Evangelio. Y
finalmente
llegaron otras escenas de los Evangelios del ciclo litúrgico.
Aquí el
“pesebre” no está configurado sólo para los niños
y para la catequesis
infantil; hay desde 1.998 un “Libro del Pesebre” que desarrolla
también
para los adultos las escenas individualmente y año tras
año es
actualizado y completado. En la página de Internet de St. Michael encontrarán: • aquí: el Prólogo del Libro del Pesebre • Historia y Teología del pesebre • La ciudad de Jerusalem como fondo del pesebre • El tronco de Jessé • La Gänseliesel de Göttingen • Imágenes y textos de todas las escenas del pesebre |
“Los pesebres son uno de los más hermosos inventos del
ser humano creyente. Con frecuencia son verdaderas obras de arte. Los
autores de los pesebres han puesto en ellos toda su fantasía y
amor, pero aún más del brillo, de la fuerza visual y de
la intimidad de su fe. Así sucede que los pesebres son fe
vestida directamente en figuras, formas y colores. Anuncian con su modo
inconfundible el Evangelio, el mensaje de la fe. Discretos e
irresistiblemente atrayentes, al mismo tiempo, desarrollan el rico y
profundo mundo de la fe en el Dios que ama al ser humano. De este modo
entran en acción como silenciosos, pero no menos eficaces
mensajeros de la Buena Nueva.” Con estos “Pensamientos ante el pesebre” comienza Christian Schütz OSB un pequeño volumen de meditaciones bajo el título “El asombro ante el establo” (Herder 1995) Nuestro pesebre de Navidad está en St. Michael como un pesebre popular en esta tradición del anuncio gráfico de la fe cristiana. Nosotros nos hemos animado a hacer una excursión para ver pesebres a través de Obereichsfeld en el año 1.996 para configurar de nuevo nuestro “antiguo” pesebre. No se trataba en primer lugar de ampliar el pesebre, más bien nuestro deseo era y es hacer visible más que hasta ahora el fondo teológico y el cumplimiento de las promesas veterotestamentarias en el acontecimiento de Navidad. Este “Libro del Pesebre” desearía estimular a meditar y contemplar el pesebre en esta dimensión profunda. Así aunque nuestro pesebre quiere proporcionar alegría a los niños y facilitarles de una forma sencilla y gráfico-narrativa la fe de la Navidad, este pesebre es, sin embargo, concebido sobre todo para los adultos. Deseamos que también ayude a los adultos a una comprensión más profunda de su fe. Por consiguiente, invitamos al mayor número posible de visitantes de nuestra iglesia, a tomarse un poco de tiempo para la contemplación del pesebre y para la lectura meditativa de un artículo u otro de este libro. Muchas personas han contribuido de una u otra forma a la nueva configuración del pesebre. Sus nombres y un agradecimiento para ellos se encuentran en las últimas páginas de este libro. En el nombre de todos ellos les deseo –a los contempladores de nuestro pesebre– un tiempo navideño lleno de paz, alegre y bendecido. P. Heribert Graab S.J. |